Varios estudios revelaron recientemente que las mancuernas, cintas de correr y prensas de piernas albergan millones de gérmenes. Cuáles son los factores que convierten esos espacios en un caldo de cultivo que puede ser perjudicial para la salud y cómo prevenirlos.
Diversas investigaciones en Brasil y EE.UU. alertan sobre niveles altos de microorganismos en equipos de gimnasio.
Las pesas, cintas y prensas de piernas pueden tener hasta 362 veces más gérmenes que un inodoro.
La sudoración y la falta de higiene adecuada contribuyen al crecimiento de bacterias perjudiciales.
Lo esencial: diversos estudios han revelado la alta carga de gérmenes en los equipos de gimnasio, superando incluso la de un inodoro en algunos casos. Un estudio de la Universidad Federal de Juiz de Fora (UFJF) encontró que pesas, prensas y cintas acumulan más de un millón de bacterias por centímetro cuadrado, un riesgo acentuado por la sudoración y el uso compartido de equipos sin desinfección adecuada. Expertos recomiendan extremar la limpieza de estos espacios y que los usuarios adopten medidas como el lavado de manos y el uso de toallas personales.
Por qué importa: la falta de higiene en gimnasios puede facilitar la transmisión de enfermedades cutáneas, respiratorias y oculares entre los usuarios:
La tiña y la foliculitis son frecuentes en ambientes húmedos y mal desinfectados.
Enfermedades respiratorias, como la gripe, se propagan rápidamente en estos espacios.
La higiene de los equipos es clave para reducir el riesgo de contagio y asegurar un ambiente seguro para los deportistas.
Diversas investigaciones científicas arrojaron alarmantes datos sobre los niveles de contaminación en los equipos de gimnasio.
Un estudio de la Universidad Federal de Juiz de Fora (UFJF), en Brasil, identificó que máquinas como las pesas, prensas de piernas y mancuernas se encuentran entre los equipos más contaminados, con una alta presencia de microorganismos perjudiciales para la salud.
Otro estudio encargado por una empresa de maquinaria de fitness en Estados Unidos reveló que las cintas de correr y bicicletas estáticas pueden acumular más de un millón de gérmenes y bacterias por centímetro cuadrado, de los cuales más del 70% son peligrosos para la salud.
Además, se encontró que las pesas tienen hasta 362 veces más bacterias que un asiento de inodoro.
Qué factores contribuyen a la proliferación de microorganismos en los gimnasios.
La proliferación de microorganismos en los gimnasios es favorecida por varios factores.
El principal es la sudoración constante de los usuarios, especialmente en días cálidos, lo que crea un ambiente húmedo y propicio para el crecimiento de bacterias y hongos. Según el biomédico brasileño Roberto Figueiredo, conocido en sus redes sociales como Doctor Bacteria, el sudor facilita la propagación de patógenos en el equipo de ejercicio, en especial cuando los usuarios no toman precauciones básicas de higiene.
Los gimnasios que carecen de un sistema de refrigeración adecuado también contribuyen a este fenómeno. Los ambientes calurosos y mal ventilados intensifican la multiplicación de microorganismos, haciendo que las superficies compartidas, como las colchonetas y las máquinas, se conviertan en focos de infección.
Cuáles son las enfermedades más comunes por la falta de higiene en gimnasios
Entre las enfermedades más comunes vinculadas a la falta de higiene en los gimnasios destacan diversas infecciones de la piel y enfermedades respiratorias.
Las infecciones cutáneas, como la tiña, son provocadas por hongos que proliferan en ambientes húmedos, como los vestuarios o equipos mal desinfectados, según explicó el dermatólogo Luiz Gameiro, miembro de la Sociedad Brasileña de Dermatología.
La conjuntivitis, una inflamación del ojo causada por bacterias o virus, puede propagarse fácilmente al tocarse los ojos después de utilizar superficies contaminadas.
Otra infección frecuente es la foliculitis, que afecta los folículos pilosos y puede generarse al tener contacto con máquinas que acumulan sudor y restos de piel.
Además, las enfermedades respiratorias, como la gripe y el resfriado común, se propagan rápidamente en estos espacios debido al contacto constante con superficies compartidas y al aumento de la frecuencia respiratoria durante el ejercicio. También se reportaron casos de diarrea como una afección derivada del contacto con equipos contaminados.
El profesor André Alvim, de la UFJF, y uno de los autores del estudio, explicó que el contacto frecuente con superficies contaminadas aumenta el riesgo de contraer estas enfermedades, que pueden propagarse rápidamente debido a la alta concentración de personas y la humedad.