El ex Midachi vive de martes a viernes en su establecimiento situado en el centro-norte de Santa Fe. También está entusiasmado en volver a los escenarios con su nuevo show junto a Dario «Chino» Volpato.
Miguel del Sel es uno de grandes humoristas que ha tenido el país y que quedará en el recuerdo por sus inmejorables personajes a lo largo de su carrera. Midachi, junto con “Dady” Brieva y el “Chino” Volpato, lo catapultó al estrellato, pero también realizó varios éxitos televisivos, como Rompe Portones o el personaje de «La Tota» en el programa de Susana Giménez.
En el transcurso de su larga carrera artística, tuvo una participación en la política como Diputado Nacional y además se postuló como candidato a Gobernador de Santa Fe en dos oportunidades.
Pero ahora cambió el rumbo de su vida y se refugió en su campo -que compró 30 años atrás- situado en el centro-este de Santa Fe tras la pandemia del coronavirus. Se hizo cargo del establecimiento ganadero y vive allí de martes a viernes.
De todas maneras, no se alejó de la actuación y adelantó que están preparando una obra junto al “Chino” Volpato en Villa Carlos Paz para el verano. “Mi otro escenario es el campo”, sintetizó lo que representa la actividad para él.
El humorista tiene dos campos que están ubicados entre las localidades de San Javier y Gobernador Crespo, en el centro-norte de Santa Fe. Uno es agrícola -que se denomina El Cacique- de 20 hectáreas, pero que se lo alquila a un vecinos, y el otro es netamente ganadero, En el campo que explota hace ganadería de la raza Braford y Brangus. Tiene 500 madres y su actividad principal es hacer el destete y vender los terneros en 200 kilos.
Por ahora, va a continuar con este modelo de negocio porque no le “da el tiempo” para ampliar las inversiones.
“Ahora, cuando empiezo a trabajar con la obra (Con Chino Volpato) y me acomode de nuevo, puedo llegar a arriesgar. Pero, por el otro lado, no hay medidas que motiven a invertir y creo que es lo que le pasa a toda la gente. De todas maneras, este desorden a mucha gente lo ayuda pero para el que hace bien las cosas, no hay mucho incentivo”, analizó.
Según recordó, cuando Midachi estaba en el apogeo, hizo muchas inversiones para mejorar la genética de su rodeo. “He comprado toros campeones, tengo buena genética. Podría tener mejor pero con los precios que he visto en los últimos remates, tampoco me voy a animar a invertir”, se sinceró.
Del Sel viaja todas las semanas al establecimiento y se queda de martes a viernes para controlar al rodeo vacuno porque ahora él mismo lo administra. Según aclaró, Luis del Sel, su primo hermano, fue quien manejaba el campo mientras Miguel actuaba y no se podía hacer cargo, pero desde la pandemia, él mismo maneja las riendas de su negocio. “En la ganadería, los números son muy finos entre todos los gastos que hay”, sostuvo.
