Murieron más de 200 vacas y lo atribuyen a una intoxicación derivada de la sequía.

Especialistas del INTA advirtieron sobre la presencia de algunos compuestos en las pasturas, que en altas concentraciones resultan letales para el ganado.

La muerte de más de 200 vacas en la provincia de Entre Ríos generó tristeza y misterio. Lo atribuyen a una intoxicación derivada de la sequía, y el caso provocó una gran preocupación entre los productores agropecuarios de la zona.

Los especialistas alertaron por la presencia de ciertos compuestos en las pasturas, que en altas concentraciones resultan letales para el ganado.

El primer hecho ocurrió en Rincón de Nogoyá, departamento de Victoria, donde fallecieron 200 novillos. El segundo fue en Chajarí, donde se perdieron 24 vaquillas preñadas. Aunque también hubo reportes de muertes similares en San Pedro, San Jaime y la ciudad correntina de Curuzú Cuatiá.

«Habíamos sembrado algunas hectáreas de raigrás y avena. En el raigrás ya hacía 20 días que había vaquillas pastando. Estas vacas que murieron estaban en la pastura de avena. El martes se les hizo el tacto, las vacas estaban preñadas, y el miércoles las largamos con las vaquillas que estaban en el raigrás. El jueves estaba todo bien y el viernes a la mañana cuando vengo, me encuentro con esto», relató el productor Osiris Robol, al medio local Chajarí al Día.

Una de las hipótesis más fuertes, que contemplan varios especialistas en la materia, es la gran concentración de nitratos y nitritos que se habría producido en las pasturas como consecuencia de la fuerte sequía ocurrida en la región.

Cómo se produce la intoxicación y cuáles son los síntomas
El jefe de Extensión Rural del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) Victoria, Raúl Brassesco, explicó que la escasez de agua en los suelos induce un proceso de mineralización a través del cual el nitrógeno se convierte en nitratos, un compuesto de gran toxicidad para el ganado.

Esto puede ocurrir tanto en campos fertilizados como en aquellos que no recibieron aplicación de nitrógeno. Los nitratos se acumulan en las plantas que luego son ingeridas por los animales, llevándolos a la intoxicación. Algunos de los síntomas son la dificultad para caminar y respirar, el color gris en las mucosas, entre otros. La muerte puede sobrevenir entre una a cuatro horas después de la aparición de los síntomas.

«La intoxicación por nitrito o nitrato es consecuencia de la concentración del nitrógeno en el suelo, cuando se dan algunas precipitaciones después de un período de sequía muy largo», indicó el médico veterinario Sebastián VIttone del INTA Concepción del Uruguay.

Asimismo, dijo que puede ocurrir a partir del consumo de los rebrotes tiernos en lotes con poco pasto, donde se concentra una gran cantidad de estos compuestos.

Desde la consultora especializada Elizalde & Riffel, explicaron que las condiciones de buena humedad y temperaturas moderadas a elevadas, asociadas a altos niveles de nitrógeno en el suelo, generan un crecimiento muy rápido de los verdeos de invierno como avena, raigrás y triticale.

«Esta situación combinada con días nublados podría generar problemas de intoxicación con nitratos y/o nitritos en los vacunos que los consumen, y causar un grave cuadro de insuficiencia respiratoria. Esta combinación puede desencadenar en la muerte de los animales en pocas horas en caso de no aplicar un tratamiento específico», advirtieron en su cuenta de Twitter.

Los especialistas explicaron que el nitrito se une a la hemoglobina, formando metahemoglobina, lo cual impide el transporte de oxígeno a los tejidos.

Por eso, en los animales muertos la sangre se ve de un color más oscuro (chocolate) y coagula con dificultad.

Asimismo, se producen hemorragias en el tracto digestivo, tráquea y corazón, según detallaron. «Normalmente la muerte sucede entre las 12 a 48 horas posteriores, aunque también puede ocurrir en minutos sin presentar signos clínicos», señalaron desde la consultora.

Deja un comentario